miércoles, 3 de junio de 2009

LOS BENEFICIOS DEL LLANTO



El llanto se ha considerado siempre como algo negativo, generalmente se habla de las bondades de la risa, pero poco se ha dicho de los beneficios del llanto.

Además de liberar adrenalina, el llanto libera noradrenalina, que actúa como neurotransmisor, contrarrestando el efecto de la adrenalina y produciendo una sensación de tranquilidad y desahogo.

A pesar de ser una ayuda para cualquier emoción interna, a medida que las personas crecen, evitan llorar y con esto aumentan la presión y el desequilibrio internos.

En las sociedades occidentales llorar en público es evitado, en especial en los hombres, donde el llanto es casi siempre ocultado. “Los hombres no lloran” dicen a los niños, pero el llanto es parte integral del desarrollo, en los primeros años es una forma de llamar la atención para satisfacer necesidades básicas como la comida o el sueño, y de expresar emociones.

Cuando a los niños no les es permitido llorar, acumulan estrés y ponen en peligro su salud. De hecho, recuperar la capacidad de llorar cuando crecemos no nos hace más débiles, por el contrario nos fortalece.



No reprima el llanto

El llanto es tan beneficioso para la salud como la risa, porque nos permite distraernos de las causas de nuestras angustias y fijar la atención en nuestros sentimientos; sintetiza y alivia el pesar humano, por eso, cuando sienta deseos de llorar, previamente busque un lugar y momento adecuado y ¡llore!

Según el doctor William Frey, del Saint Paul Ramsay Medical Center, en Minessota, los gestos de la risa y el llanto son similares y “una buena llorada” alivia tensiones, elimina la tristeza y permite que una persona se conozca mejor a sí misma y se relacione de una forma más honesta con los demás.

Los resultados de los estudios realizado por Frey demuestran que “llorar no sólo viabiliza el desahogo y la distensión de las emociones, sino que permite a una persona ver con claridad; pues las penas obstruyen el intelecto”.